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Nutrición » Funciones y propiedades del yodo en la alimentación


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YODO

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Fuentes de yodo

Mariscos
Mariscos, pescados y verduras/hortalizas -especialmente las que crecen en suelos ricos en yodo-.

Propiedades, funciones y beneficios

El yodo favorece el funcionamiento de los tejidos nerviosos y musculares, así como el sistema circulatorio. Además, colabora en el metabolismo de otros nutrientes, y juega un papel esencial en el adecuado desarrollo de la glándula tiroidea.

Las hormonas tiroideas, dependientes de la concentración de yodo, tienen un papel destacado en la transcripción genética regulando la tasa metabólica basal. Una alteración de los adecuados niveles de estas hormonas puede afectar al crecimiento y maduración del sistema nervioso central en la etapa prenatal y los primeros años de vida, y a su posterior desarrollo. Asimismo, estas hormonas intervienen en diversas reacciones químicas como la actividad enzimática y la síntesis de proteínas, y se encargan de regular diferentes procesos fisiológicos como el crecimiento y desarrollo, el metabolismo y la función reproductiva.

Cantidad diaria recomendada de yodo

Uds: µg/día
Bébes Niños Embarazo Lactancia
0-0,5 0,5-1 1-3 4-8 <18 18-30 31-50 <18 18-30 31-50
110 130 90 90 220 220 220 290 290 290

Mujeres
9-13 14-18 19-30 31-50 51-70 >70
120 150 150 150 150 150

Hombres
9-13 14-18 19-30 31-50 51-70 >70
120 150 150 150 150 150

Absorción y almacenamiento en el organismo

Aunque requerido en muy pequeñas cantidades por nuestro organismo, la presencia de este oligoelemento se antoja indispensable para determinadas funciones fisiológicas. La mayor parte del yodo ingerido es transformada en yoduro y absorbida en el intestino delgado, para pasar al líquido extracelular y ser captada por la glándula tiroides, el riñón, las glándulas mamarias y las salivares, el plexo coroideo, la mucosa gástrica y la placenta en su caso, entre otros órganos y tejidos. El exceso es elimando a través de la orina.

Deficiencia de yodo

Las necesidades de nuestro organismo en lo que al yodo se refiere, se ven por lo general cubiertas por los alimentos que habitualmente ingerimos. No obstante, deficiencias de selenio, hierro o vitamina A pueden contribuir a una falta de yodo, que podría llevar asociados, en los períodos de crecimiento y desarrollo y muy especialmente durante el embarazo y la lactancia, problemas que abarcan desde la pérdida del embarazo hasta defectos congénitos como hipotiroidismo, cretinismo, retardos mental y del crecimiento, baja estatura o sordera entre otras manifestaciones. En niños y adolescentes, especialmente en la adolescencia femenina, la carencia de yodo puede conllevar el aumento de tamaño de la glándula tiroides o bocio. En los adultos, puede causar además hipotiroidismo y trastornar la capacidad reproductiva.

Exceso de yodo

El exceso de yodo derivado de la alimentación es, por lo lo general, bien tolerado por la mayoría de individuos. No obstante, la ingesta elevada de yodo se asocia con el riesgo de paceder bocio, tiroiditis, hipotiroidismo, hipertiroidismo, cáncer tiroideo y diferentes reacciones agudas dependiendo de las personas.

Alimentos ricos en yodo

Aporte por 100 g de porción comestible
Mújol330,00 µg
Salmonete190,00 µg
Bacalao170,00 µg
Bacalao en salazón170,00 µg
Mejillón105,00 µg
Abadejo103,00 µg
Bogavante100,00 µg
Langosta100,00 µg
Camarón90,00 µg
Chorizo blanco90,00 µg
Gamba90,00 µg
Langostino90,00 µg
Harina de maíz80,00 µg
Leche condensada74,00 µg
Calamar64,00 µg
Pulpo64,00 µg
Sepia64,00 µg
Ostra58,00 µg
Percebe58,00 µg
Vieira58,00 µg
Solla53,00 µg
Caballa51,00 µg
Atún50,00 µg
Jurel48,00 µg
Palometa48,00 µg




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